Los argumentos jurídicos son fundamentales para sustentar una posición en un juicio o debate legal. En este artículo, te explicaremos los diferentes tipos de argumentos jurídicos que existen.
Cuantos son los tipos de argumentos jurídicos y cuáles son sus nombres:
- Argumentos de autoridad: Se basan en la opinión de expertos o en la interpretación de una ley o norma.
- Argumentos a fortiori: Parten de una premisa conocida para llegar a una conclusión lógica.
- Argumentos por analogía: Se comparan dos situaciones similares para inferir una conclusión en la situación en cuestión.
- Argumentos jurídicos a contrario sensu: Se emplean para demostrar que algo no está permitido porque la ley o norma no lo contempla.
- Argumentos jurídicos a pari: Se utilizan para demostrar que dos casos son iguales y, por tanto, deben ser tratados de la misma manera.
- Argumentos jurídicos ad hominem: Se centran en desacreditar al oponente para deslegitimar su argumento.
Cuales son los tipos de argumentos jurídicos y sus características:
Argumentos de autoridad:
Los argumentos de autoridad se basan en la opinión de expertos en una materia, en la interpretación de una ley o norma por parte de un juez o en la jurisprudencia. Este tipo de argumento es muy utilizado en los juicios y debates legales porque permite sustentar una posición con una fuente confiable y reconocida.
Argumentos a fortiori:
Los argumentos a fortiori parten de una premisa conocida para llegar a una conclusión lógica. Por ejemplo, si se sabe que un delito es castigado con una pena determinada, se puede inferir que un delito más grave será castigado con una pena aún mayor.
Argumentos por analogía:
Los argumentos por analogía se utilizan para comparar dos situaciones similares y, a partir de ello, inferir una conclusión respecto a la situación en cuestión. Por ejemplo, si en un caso anterior se resolvió una situación similar de cierta manera, se puede inferir que en el caso actual se debería resolver de la misma manera.
Argumentos jurídicos a contrario sensu:
Los argumentos jurídicos a contrario sensu se basan en demostrar que algo no está permitido porque la ley o norma no lo contempla. Por ejemplo, si la ley no permite expresamente la realización de una determinada acción, se puede inferir que dicha acción está prohibida.
Argumentos jurídicos a pari:
Los argumentos jurídicos a pari se utilizan para demostrar que dos casos son iguales y, por tanto, deben ser tratados de la misma manera. Por ejemplo, si en un caso anterior se resolvió una situación de determinada manera, se puede inferir que en el caso actual, que es similar, se debería resolver de la misma manera.
Argumentos jurídicos ad hominem:
Los argumentos jurídicos ad hominem se basan en desacreditar al oponente para deslegitimar su argumento. Por ejemplo, si se demuestra que el oponente tiene intereses personales en el caso, se puede inferir que su argumento no es válido.
Significado de los tipos de argumentos jurídicos:
Los diferentes tipos de argumentos jurídicos permiten a los abogados y juristas sustentar sus posiciones en los juicios y debates legales de una manera lógica y fundamentada. Cada tipo de argumento tiene sus características y se utiliza en situaciones específicas para demostrar la validez de una posición.
Es importante conocer los diferentes tipos de argumentos jurídicos para poder utilizarlos de manera efectiva en los casos a los que se enfrenten los abogados y juristas.
En conclusión, los tipos de argumentos jurídicos son fundamentales para sustentar una posición en un juicio o debate legal. Conociendo los diferentes tipos de argumentos jurídicos, podrás mejorar tus habilidades argumentativas y tener
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